Ruta 10. Río Guadalteba. Entre canchos y olivos (Itinerarios fluviales)
Desde la ermita bajamos por un camino entre eucaliptos (Eucalyptus spp.) en busca de la orilla del Guadalteba, la cual vamos a recorrer por su orilla izquierda en el sentido de las aguas, por la llanura aluvial. De la posición inclinada de algunos álamos se deduce que las crecidas en periodos lluviosos deben ser importantes. En los tocones y fustes de algunos de estos vetustos árboles, crecen algunos hongos saprófitos, tipo yesqueros. Al llegar a un meandro, aparecen de manera profusa los tarajes (Tamarix africana). En realidad, aunque no lo distinguimos, estamos ante la cola del embalse de Guadalteba. Proponemos, como experiencia singular, adentrarnos un corto trecho en el tarajal. Tras retroceder, no quedará más remedio que rodear la curva y avanzar junto a la línea de vegetación, con el cauce del río más alejado y reconocible por la más altiva vegetación riparia. Al final del paraje de la Puente, el carril nos lleva a pie de la carreterita, la cual tomaremos en el sentido contrario al traído hasta ahora. Mientras caminamos, en el horizonte veremos descollar la torre del homenaje del castillo de la Estrella (Teba), testigo de la muerte del caballero y héroe escocés Sir James Douglas, acontecida en agosto de 1330 cuando luchaba junto al rey Alfonso XI, en la toma de Teba a los agarenos.
En el tramo que media hasta el final descubriremos, equidistantes, unos mosaicos con imágenes de los parajes más sobresalientes del término municipal de Teba. Una vez finalizado el itinerario, a 1,5 km de la ermita, siguiendo el carril asfaltado en la misma dirección que traíamos, recomendamos visitar un observatorio ornitológico situado en una explanada dominante sobre la cola del embalse de Guadalteba.
El lugar marcado como punto de inicio el santuario de la Virgen de la Cabeza y San Isidro Labrador. Hasta aquí se llega a través de la A-7278, carretera que enlaza Teba con la A-367 (Ronda-Ardales), tomando un desvío por un carril asfaltado justo en el punto kilométrico 10. Unos 600 m después aparcamos el vehículo en el arcén, a la altura de la ermita.